Regina
Alcover: “Mi
único vicio siempre ha sido trabajar
y mejorar como persona”
Una artista completa,
actriz, cantante, reportera, conductora, locutora, pero sobretodo una excelente
madre. Se sensibiliza y cuenta experiencias y vivencias personales tanto de
ella como de sus hijos.
El
jueves me atreví a llamar a Regina Alcover, tenía que conseguir la entrevista
como sea y así fue, me contestó el teléfono y muy amable me dijo que vaya al
día siguiente a la radio para que me brinde la entrevista que desee. Para ser
sincera, yo no sé si hubiera aceptado que alguien que no conozco me llame y me
diga que quiere una entrevista conmigo, pero ella, tan sencilla y amable, además
con una gran trayectoria ¡me dijo que sí!, así que muy emocionada le agradecí y
colgué. Fui a mi casa e investigué más sobre ella y empezar a redactar las
preguntas.
Al día siguiente, ya con las
preguntas plasmadas en un par de hojas de papel, con un lapicero y resaltador
en mano, fui al encuentro con Regina Alcover, una de las actrices más admiradas
del Perú, además de ser la madre de uno de mis cantautores peruanos favoritos.
Salí de mi casa en Miraflores a las 9.45am, tomé un taxi y mientras me dirigía
a Aramburu con la vía expresa, a la torre de RPP Radio Felicidad en donde
Regina tiene un programa en la mañana, iba repasando las preguntas a ver si no
me olvidaba de nada.
Al llegar a RPP me anuncié
en portería, se comunicaron con Regina y pude ingresar, subí al 5to piso en
donde se encuentran las cabinas de casi todas las radios pertenecientes al
grupo RPP, ubiqué radio Felicidad en donde se encontraba mi entrevistada. Nos
vimos a través de un vidrio muy grande, me sonrió y me hizo señas para que
ingresara. Me preguntó si yo era la que la había llamado ayer, le dije que sí, y
me regaló una sonrisa. Ella se encontraba en pleno programa así que la esperé
un momento y aproximadamente a las 10.30am empezamos con la entrevista.
Regina siempre amable y muy
habladora, cuando me contaba se sentía una emoción inexplicable saliendo de
ella cada vez que se refería a su familia. Es una mujer admirable que vive y
disfruta cada instante de su vida. “Creo que las personas debemos honrar la
vida, y no la honramos lo suficiente”, Regina Alcover.
-Tu mamá ha sido actriz de radioteatro y papá
cantante, definitivamente has crecido en un hogar rodeado de artistas. ¿Esto ha
influido a que tu te dediques a hacer lo que haces?
-En realidad yo
no quería ser artista. Creo que las circunstancias hicieron que yo lo fuera
porque vivíamos puras mujeres, estábamos la bisabuela, la abuela, mi mamá, mi
hermana y yo y todas eran artistas, a mi me hubiera gustado ir a la
universidad, estudiar psicología o a lo mejor hubiera sido medico pediatra, no
sé, la psicología me apasiona, pero si hubiera elegido una carrera, hubiera
elegido médico, cirujana jamás, pero sí psicóloga o pediatra.
A mi me apasiona
las relaciones humanas y tengo vocación de servicio entonces si sé que esto
hubiera sido perfecto para mi. Pero me vi envuelta en esta situación de ser
artista porque no, si yo te contara… estuve muy poco tiempo en un colegio, por
mi trabajo tuve que estudiar en mi casa y daba exámenes con valor oficial en el
ministerio, ¡imagínate! era terrible, no era una chica normal, pero cuando yo
era chiquita, estuve en el colegio de “Las Canonesas de la Cruz” por muy poco
tiempo; 3 meses, una cosa absurda y, decían: “ay, la hijita de la artista,
seguro que sabe actuar” entonces, me amarraron a una silla para que dijera una
poesía y yo cuando salí, bien amarrada en la silla, decía; “¡Dónde está mi mamá!”
yo no quería salir, es loco pero es verdad.
-¿Cómo fue ese ingreso casual al mundo de la televisión?
-Yo había
ayudado a mi hermana a recordar la letra de un comercial y justo le dio dolor
de panza antes de salir al aire así que lo hice yo; entonces, desde ahí me
quede trabajando en Panamericana hasta que fui grande. Es que a mi no me
elegían, yo era el pato feo, yo no me sabía arreglar y mi hermana era más
chiquita, con sus trencitas… era linda, es linda, pero a mi no me elegían
nunca, siempre fui de suplente y me ha ido muy bien.
-A partir de tu ingreso a la televisión, empezaste haciendo
comerciales, luego como figura en las novelas de Panamericana Televisión y
cantando en algunos programas. En el 63 tuviste la oportunidad de actuar en
“Mujercitas” junto a tu prima, tu tía y tu mamá. Cuéntame esa experiencia ya
que no cualquier actor logra compartir escena con su familia.
-Fue maravilloso
pero también fue terrible porque era en vivo y nos aprendíamos los libretos
almorzando, la sopa hirviendo me acuerdo, y vestidas ya para ir a hacer la
novela, puedes creerlo, en esa época no habían los videos, era todo en vivo. Me
acuerdo que un día aprendiéndome la letra, no me la aprendí lo suficientemente
bien y cuando salí me olvidé todo, eso se llama una laguna y yo era chiquita
así que no es por edad, a los chicos también les pasa, me olvide por completo y
no era por nervios, simplemente fue un bloqueo mental, estas en vivo, me tocaba
explicar y empezaba el diálogo diciendo: “Mamá, no se como empezar” y, me
abracé a mi tía y le dije: “Me olvidé” (entre risas), mi tía, que tenía toda la
experiencia del mundo, me dijo: “No te preocupes, seguro lo que me quieres
decir es respecto a esto…” entonces ahí me dio la pauta y agarré el hilo, olvídate
hay anécdotas tan increíbles. Luego bajó el director y me dijo de todo, lloré,
sufrí, pero sabes que es lo lindo de esta profesión, es que aprendes a tener
alto nivel de frustración, te llegas a acostumbrar a que te digan “No,
horrible, vuélvelo a hacer” y es bueno porque en la vida ya no sientes que te
ofenden o que te están diciendo algo que te va a hacer que te dé “harakiri”, creas tu propia barrera y eso
sí es importante porque escucho yo a tanta gente joven que “están estresados” o
que alguien les dijo algo y se ofendieron, nadie te ofende, tu te ofendes sola.
-¿Qué recuerdo tienes de tus padres?
-Una
gran frustración en mi vida es no haber disfrutado de mi papá. Todos los chicos
que tienen a sus padres y que los disfrutan y se pelean y que viven a su lado
me parece envidiable porque yo viví buscando a mi papá en cada esquina. Mi papá
murió cuando yo tenía 3 años entonces me inventé la idea de que mi papá se
había divorciado y que algún día lo iba a volver a encontrar. Pero no pues, era
un invento porque papá había muerto con un tumor al cerebro de 26 años.
Mi mamá era una
mujer muy alegre, la perdí en el año 2009, se fue pero me dejó las mejores
cosas también. Mi abuela, mi madre han sido las mujeres más importantes en mi
vida y mi hermana porque hemos sido muy unidas siempre y me enseñaron muchas
cosas en la vida, marcaron pautas muy importantes.
-¿Todas esas enseñanzas las has puesto en práctica con tus
hijos?
-Definitivamente
sí, aunque uno también hereda los errores. La diferencia es que con mis hijos he
tratado de actualizarme y ser una mamá más en la onda de ellos y no con esas
ideas antiguas, yo creo que los hijos también nos enseñan muchas cosas en la
vida.
-A los 21 años tuviste a tu primer hijo, ¿Qué significan los logros de
Gianmarco para ti como madre?
-Esto
lo he repetido siempre y te vas a reír pero, yo siento cuando lo veo en el
escenario igualito como cualquier mamá cuando ve actuando a su hijito en el
nido y es lo máximo. Para las madres, algún día cuando lo seas te vas a acordar
de lo que te digo, tu hijo es chiquito siempre, tu hijo es el de siempre, el de
todas las edades el de 14, el de los 21, el de los 4. Yo me acuerdo, e
inmediatamente relaciono, verlo en el escenario cuando fui a una actuación, él
tenía 3 o 4 años y hacía de árbol, que me pasé pegando todas las hojitas verdes
toda la noche en un polo marrón y sabía todo su texto; él hacía de árbol, el de
los símbolos patrios, y su amigo que se olvidó la letra hacía de el sol, pero
los niños son tan crueles que cuando terminó la actuación y salimos, Gianmarco
le dijo: “¡Oye, estuviste pésimo!” (risas) y yo no sabía dónde meterme. Ahora
siempre nos reímos recordando eso y, verlo de árbol, hablando y diciendo su
texto o cuando cantaba, cuando bailaba, para mi era fantástico y siento igualito,
es una emoción muy grande pero sobretodo, verlo crecer como ser humano, como
papá, como hijo y esposo, eso no tiene precio.
-Gianmarco en “Retrato”, una de sus canciones, dice: “Tengo
en un libro las palabras de mi madre y en el recuerdo de mi padre una oración,
me dieron tantas cosas buenas, me dieron alas y mil pruebas, me enseñaron
siempre a pedir por favor”. ¿Quizá es el mejor tributo que un hijo le pueda
hacer a una madre el plasmar estas palabras en sus canciones?
-Es hermoso, él me ha hecho una canción hermosa que no la ha
grabado, la tengo solo para mi, me la regaló un año nuevo y “anegué el cuarto”
como dice él, me puse a llorar, no sabía que decir. Pero yo también les
escribo, que hace mucho no lo hago, yo tengo un libro en blanco para cada uno
que he ido llenando a lo largo de sus vidas y de la mía, donde les cuento cosas
que pasaron sin que nadie tenga que venir a contárselas después, para el día de
mañana no digan “esto no me dijo mi mamá”, ahí está o cuando nos hemos
disgustado. Es una guía para la vida de cada uno, de lo que hicieron bien, de
lo que hicieron mal, de lo que yo creía que hicieron mal, también les he pedido
disculpas.
Mía es una
chiquita que he disfrutado mucho porque la he tenido a los 36 años, entonces,
hay frases de Mía que escribía, “Mami, la maestra está insoportable, ¿será
porque somos 45 en clase?”, era mi Mafalda, ella siempre era mi Mafalda, o sino
“Mami, cuando yo sea grande y me pelee con mi esposo, tu cuida a tus nietos y
no te metas”, que es esto decía… (entre risas). Todos ustedes, cuando eran
chiquitos, los papás comentábamos una noche con amigos, que cosas han dicho,
que originalidad se les ha ocurrido, porque los niños son mágicos, entonces
todas esas frases de Mía y esas cosas están guardadas ahí.
-Mía cuenta, en una revista local, la anécdota del ratón y
termina diciendo “Nunca me dijo que no, siempre encontraba otra alternativa”
¿Qué sientes al saber que Mía siempre te recuerda como una madre ejemplar que
nunca le decía No a sus hijos y siempre buscaba la manera de resolver las
cosas?
-Me dijeron una vez, un psicólogo, que no
hay que decirles “No” porque no es una cosa muy severa, entonces me acuerdo que
cuando estaban muy bebés y agarraban por ejemplo algo que no debían, yo los
distraía con otra cosa y les decía “Mira, que cosa tan hermosa” y ya, entonces
no sufrían, quizás con Mía evité más el sufrimiento que con Gianmarco.
-¿Qué son para ti tus hijos Mía y Gianmarco?
-Los hijos son
pieza importante en la vida de una madre. Ellos siempre nos censuran, yo me
acuerdo que Gianmarco como Mía, siempre me decían: “Mamita, porque ustedes
siempre trabajan tanto, porque no están más con nosotros”. Cuando Gianmarco era
chiquito no le gustaba viajar, lo llevábamos con la nana, los pañales, con todo
y cuando abría los ojitos en un techo que no era el suyo, parecía “ET”, decía:
“mi casa, mi casa”, en cambio Mía no, ella se acostumbró a vivir en varios
sitios y tenía su frazadita y me decía: “Mami como o me duermo?”, “Sí, primero
comes y luego te duermes”, “Ah ya”, comía y se echaba en cualquier lugar. A Mía
tu la mandabas a Japón y se ponía Kimono, le da lo mismo, ella es muy
cambiante, Gianicito padece más el hecho de salir de su lugar, ama su tierra.
-¿Tienen alguna anécdota?
-La anécdota de
los chupones. Gianmarco tenía cinco chupones, no tenía dos o uno como la gente
normal, ¡no!, dos en cada mano y uno puesto, entonces en la noche cuando dormía
y se le calentaba uno, lo disparaba y se ponía otro, así hasta que se quedaba
con el último y no lo tiraba más. Entonces, a los dos años y pico tuve una
conversación muy seria con él y le dije: “Mírame a los ojos”, ya sabía que era
algo serio, “Tienes que dejar los chupones porque se te van a salir los
dientes, pero ya no te van a crecer otros si sigues con chupón, no vas a poder
comer helados” un drama así terrible, me miró “¿Qué hago mami?”, “Los tiras”, y
fue y los tiró al inodoro y claro flotaban, “Mami no se mueren” me decía, “No
se mueren”, y le fue muy difícil dejarlos. En cambio a Mía le dije el mismo speach y me dijo “Ok mami, toma”, me dio
su chupón, tenía uno solo y me lo dio, no tenía problema. Ves que los caracteres
son tan distintos.
-¿Qué significó para ti “Me Haces Sentir Como Nuevo”, el
disco que grabaste junto a “Joe Danova” (Javier Zignago).
-En general grabar
con Joe… te explico, yo me enamoré cuando tenía 14 años de él y era mi ídolo de
La Nueva Ola, calculas lo que es casarse con el ídolo de La Nueva Ola, yo viví
soñando que me cantara una canción entonces moría y vivía por él, mi adoración,
nos conocimos a los 14 y nos casamos a los 18, y bueno él me dio un hijo
precioso. Luego fue la falta de experiencia en la vida pero yo creo que más
allá que pasar en cosas difíciles con una pareja, lo hermoso es lo que te deja
al pasar. Hay personas que vienen por una temporada, otras se quedan toda la
vida y nosotros esa temporada creo que la vivimos maravillosamente bien.
-¿Qué recuerdos tienes de Ricardo Roca?, tu segundo esposo.
-Yo me separé de
él por otras circunstancias, totalmente distintas pero creo que también fue
importante en mi vida porque me dejo a mi nena y yo creo que son experiencias,
a mí no me gusta hablar de la palabra fracaso.
Hoy después de
cuatro matrimonios en mi vida, he elegido vivir sola porque tengo mucho
trabajo, no tengo tiempo para una pareja, en mi corazón sí pero en mi vida no,
no tengo espacio físico para poder compartir.
-¿Qué es para ti la soledad?
-Me encanta, es mi amiga, mi compañera. He aprendido a vivir
sola y he aprendido a disfrutar de la soledad, yo creo que las señoras mayores
no tienen que tenerle miedo a la soledad. Lo que pasa es que lo mío fue una
elección, no me quedé sola, yo elegí estar sola y sí hay una diferencia entre
elegir y quedar sola.
-¿Qué son para ti tus hijos y tus nietos?
-Es una recompensa el que tu hayas tenido un hijo y ese hijo
tenga los suyos, es un regalo, eso lo sienten todas las abuelas. El amor no se
puede medir, yo no tengo centímetro para eso, simplemente disfruto mucho porque
los chicos son muy distintos o porque encuentras cosas que tenía, por ejemplo,
Gianmarco en Fabián que es muy parecido a su padre, no es igual pero es
parecido, tiene toda la ternura que tiene su padre; Abril es más independiente,
ella es más directora de orquesta y Nicole es una ternura también, es otro tipo
de criatura, me hace acordar más a Mía.
-En cuanto a la actuación, ¿Cómo construyes tus personajes,
Qué método utilizas?
-Yo no tengo ningún método, yo soy autodidacta y simplemente
las cosas que hemos hecho algunas las hemos trabajado más que otras, ya que
algunas son más difíciles que otras; por ejemplo, en “Perdidos en algún lugar”,
me tocó ser una mujer grande con un retardo psicomotriz, entonces lo que hice
fue aplicar los movimientos de un niño de nido en un adulto, al cambiarle las
actitudes tu ya veías un retardo psicomotriz, fue muy interesante ese trabajo
para mi; pero no, no tengo una ciencia, no estudié teatro, como te dije soy
autodidacta y admiro a la gente que puede estudiar, siempre, los admiro a
ustedes a la gente joven que tienen la oportunidad maravillosa de poder ir a la
universidad, de realizarse con las posibilidades que les dan los padres, con tu
propia voluntad. A mi me encanta siempre estudiar, siempre estoy llena de
libros y de cosas, así paro metida para lo que tengo que hacer aquí en la radio
que es una asignatura que tenía pendiente. Creo que he aprendido de la vida
siempre y me ha servido mucho, he tenido mucha suerte el rodearme con gente que
me ha enseñado muchas cosas.
-Te has dedicado más de 25 años haciendo teatro, ¿Qué es
para ti el teatro?
-Significó
en algún momento lo mejor de mi vida junto a la familia, porque el teatro me
sostuvo en momentos muy difíciles. Todas las personas deberían tener un
escenario, porque todos actuamos, tú actúas conmigo de una manera, con tus
amigas de otra, con tu papá y tu mamá actúas, vivimos actuando, somos actores
de la vida real pero, sin embargo para hacer catarsis para mejorar un montón de
cosas en tu vida, tendrías que tener un escenario porque crecer arriba, porque
no sabes de las cosas que eres capas de hacer, e interpretando a otras
personas, aprendes tú como ser humano.
-Sé que tienes una gran amistad con Osvaldo Cattone, ¿Qué
vínculo tienen?
-Apareció en mi vida Osvaldo en un momento muy difícil, mi
separación con Joe, entonces hacer los éxitos que hicimos, fíjate como es la
vida, por un lado te quita y por otro lado te regala. Esa parte de mi vida
estuvo marcada por el éxito por un lado y la tristeza por el otro, la
separación muy jovencita, me separé a los 24 años más o menos, tenía un hijito
chiquito, fue una cosa muy dura para mi y a la vez la vida nos regalaba éxito,
con quién, junto a Osvaldo. Entonces, Osvaldo es para mí como el hermano que
nunca tuve, una persona a la que quiero. Él siempre dice: “No quiere hacer
teatro conmigo, ya no quiere trabajar” pero ya no tengo tiempo, el teatro fue
una etapa, si vuelvo alguna vez será para decir adiós.
-Si te dieran a elegir entre la radio, la televisión, el
teatro o el cine. ¿Qué elegirías?
-Yo defino: el
teatro es como el amor, coqueteas con la obra, el día del estreno te casas,
después vienen los días normales del matrimonio, un día la quieres hacer, otro
día no tienes ganas, te duele una muela, otro día murió alguien y el día que te tienes que separar, al
final, te desgarras, te desvives y adiós, se terminó, pero empieza otra obra.
En realidad, la televisión te da popularidad, el teatro te viste de fiesta, el
cine pues, he tenido solo una experiencia en cine cuando era chiquita tenía 6
años, y la radio es una pasión, porque en la radio te metes al corazón de la
gente.
-¿Cómo ha sido tu paso por el periodismo, qué te dejó?
-Trabajé en la
cadena “Telemundo” en Miami, fue fantástico, como te digo, todas son
experiencias que llenan tu vida, que te enriquecen y te hacen ser mejor
persona.
-¿Qué recuerdos
tienes conduciendo tu propio programa llamado “Regina y Punto” en el canal 07,
Te hubiese gustado continuar en ese rubro pudiendo haber llegado a ser una
referencia televisiva?
-A mi me gusta asombrarme de las cosas, me gusta asombrarme
de las cosas que puedo hacer y eso lo vas descubriendo, creo que las personas
tenemos un potencial que vamos descubriendo. No me hubiera quedado más tiempo
en la televisión ya que quita demasiado tiempo para otras cosas que quería
hacer. Como te dije, igual que las personas, las cosas llegan a tu vida por un
tiempo y el tiempo que están es que los debes disfrutar. Ahora llevo casi 4
años en la radio y siento que estamos sacando un programa al aire muy
importante y no nos ganan, estamos en primer lugar de la música del recuerdo y
la estamos luchando cada día, trabajo con gente muy joven y si no me pongo las
pilas imagínate, a veces se las pongo yo a ellos.
-Haz sido: actriz, animadora, cantante, locutora, reportera y excelente
madre, ¿Crees que te ha faltado experimentar algo más?
-A
lo mejor hago algo nuevo como escribir cuentos que ya los tengo escritos, son
unos cuentos que estoy trabajando hace unos años con Gianmarco porque él es el
productor, pero tengo que esperar
que mi productor tenga tiempo para poder sacar los cuentos, pero yo ya los
hice, ya hice las canciones, hice la música, las letras y las historias de unos
cuentos para niños. Eso me falta hacer, pero como te dije, uno siempre debe
experimentar cosas, todo vale en la vida.
-¿Qué te inspira diariamente a continuar con lo que haces?
-Estar viva, creo que tenemos un tesoro maravilloso en la
vida, en realidad tres: Los tesoros del cuerpo, los materiales y los del
corazón. Los materiales también nos sirven para pagarte y cuidar el cuerpo,
cuidar la salud, pero lo más valioso es el corazón, el corazón de las personas,
es lo que más me inspira y yo tengo una vida espiritual bien importante. Soy
budista hace seis años y es un budismo para la vida cotidiana y estoy muy
agradecida con la vida por eso, porque sería lindo que todas las religiones se
unieran, en este caso la nuestra es laica es sociedad para la cultura y para la
paz y nuestro único incentivo es tratar que todo el mundo sea feliz.
-¿Cómo manejas el reconocimiento de la gente hacia tu trabajo?
-Mi abuela siempre nos dijo que nosotros éramos obreros de esto, que nunca nos creyéramos estrellas, ni divos porque esto es efímero, un día eres muy conocido y otro no se acuerdan más de ti. No es nuestro caso felizmente porque yo ante los años que llevo en esta carrera, siempre la gente ha estado apoyándome, ha sido siempre mi gran fortaleza, mi fe, la gente y el amor de las personas te sostienen evidentemente entonces tu lo retribuyes con el mismo amor.
-¿Tienes o has tenido algún vicio?
-Trabajar, es mi gran pasión. Yo no tomo, no fumo, no
trasnocho, me levanto muy temprano con las gallinas. Me levanto a las cinco de
la mañana, preparo todas mis cositas para ir a trabajar, hago mi oración, mi
mantra en la mañana y en la noche. También soy coordinadora del grupo al que
pertenezco, tengo dos programas en la radio, “El espejo” los domingo a las ocho
de la noche y todos los días de siete a doce del medio día y estoy haciendo dos
series de televisión.
Muy bella entrevista, sabioss consejos, me gustaría conocerla .;)
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